Características de una persona justa y de una injusta
Hoy en día se habla de la "ética de la justicia", la cual se basa en las convenciones compartidas del acuerdo social de un grupo de individuos que establecen ciertas normas para asegurar una sana convivencia. El cual se fundamenta en la aplicación de principios morales abstractos. Es importante la imparcialidad, mirar al otro como un otro genérico, prescindiendo de sus particularidades como individuo. La ética de la justicia se concentra en tres principios: el respeto a los derechos de los demás, el imparcialismo y la objetividad que se manifiesta en la coincidencia de los juicios.
Así como ser justos implica reconocer, aplaudir y fomentar las buenas acciones y las buenas causas, también implica condenar todos aquellos comportamientos que hacen daño a los individuos o a una comunidad y velar para que se cumplan las normas y no perjudiquen a toda una comunidad.
Una persona justa:
· capacidad de discernir entre lo que está bien y lo que está mal.
· Se caracteriza por ser honesta, recta, compasiva y humanitaria.
· No permite que se cometan atropellos contra nosotros mismos ni contra los demás.
· Búsqueda del cumplimiento de sus deberes y obligaciones.
· Se caracteriza por ser respetuosa consigo mismo y con los demás.
· Son estrictos consigo mismos y con los demás.
· Responsables con sus deberes.
· actúa con equidad.
· trasciende el egoísmo.
· Capaz de tomar sus propias decisiones.
Persona injusta
· desconocen o no son respetados los derechos fundamentales de las personas.
· egoísta, insensibles, arbitrarios, desagradecidos y desconsiderados.
· Irresponsables.
· Desconocen sus deberes y obligaciones.
· La ignorancia.